Cuando uno pasea por el complejo turístico de Walt Disney World en Orlando, se envuelve en un mundo único donde todo brilla con perfección. Un lugar de magia donde ni una sóla brizna de hierba está mal situada.
Cuesta creer, por tanto, que en un lugar tan idílico como éste existan también sombras y zonas abandonadas... Pero las hay.
En el artículo de hoy te invitamos a coger tu material de espeleólogo, y acompañarnos en una singular aventura para desenterrar las zonas más ocultas de Disney World en Florida.
Discovery Island
¿A quién no le gusta una isla?
Situada en el centro de Bay Lake, esta isla fue adquirida por Disney en 1965 junto con otras parcelas que formarían sus dominios en Florida.
Se inauguró con el nombre de Treasure Island (La Isla del Tesoro) el 8 de abril de 1974, como un lugar donde observar la vida silvestre de los pantanales de Orlando.
Sin embargo, la compañía tenía planes mucho más ambiciosos para el islote.
Tomando como base La Isla Del Tesoro, la célebre novela de Robert Louis Stevenson que fue una de las favoritas de Walt Disney y que igualmente le sirvió de inspiración tanto para sus películas como para diseñar Disneylandia, la compañía transformó la isla.
Su nombre cambió a Discovery Island pasando a ser un parque de ocio que combinaba una reserva natural con diversas atracciones y actividades.
El lugar se convirtió en el hogar de diversos animales exóticos como tortugas y lémures, además del gorrión costero cuyo último ejemplar vivió en la isla hasta que, con su muerte en 1990, se dio por extinguida su raza.
La isla además mezclaba este centro de animales con algunos decorados inspirados en las novelas de piratas, Cast Members vestidos a juego y diversas atracciones, principalmente de tipo didáctico, que ofrecían diversiones y juegos.
La isla cerró al público el 8 de abril de 1999, exactamente 25 días después de su inauguración, aunque durante algunos meses se trabajó en trasladar a los animales al nuevo parque de Disney's Animal Kingdom así como a otros zoológicos del país.
La apertura un año antes del parque Disney's Animal Kingdom se entiende como la razón principal de este cierre, ya que el nuevo parque era una versión mucho mas grande y con muchas más posibilidades de lo que ofrecía la pequeña isla de Bay Lake.
Prueba de ello es que el Safari Village de Disney's Animal Kingdom pasó a llamarse Discovery Island en un claro homenaje a esta curiosa zona abandonada de Disney.
No obstante, el hermetismo que suele rodear muchas de las decisiones de Disney junto con lo que resultó ser un cierre algo precipitado, llevó a envolverla en un halo de misterio para las mentes mas ávidas de todo tipo de teorías fantásticas y conspiratorias.
Eso llevó a que en el año 2010, Shane Pérez pasara a hacerse famoso por visitar de manera ilegal la isla abandonada y narrar la experiencia con todo lujo de detalles en su
blog.
El aventurero esperó a la caída de la noche para llegar a la isla a nado, con el peligro que eso conlleva en ciertas aguas de Florida. La visita de Shane duró aproximadamente 3 horas, tiempo en el que recorrió la mitad de la isla, pero lo que se encontró lo dejó sin aliento.
La madre naturaleza había recuperado mucho del terreno que en su día le pertenecía, haciendo impracticable algunos de los senderos diseñados para visitantes. Pero entre maleza y árboles, toda la instalación de la isla seguía en pie.
Probablemente por resultar más económico, Disney no desmanteló la isla, sino que sencillamente la abandonó. El lugar, mas allá del deterioro lógico, seguía tal cual. Edificios, carteles… Pero lo más sorprendente es que en el interior de estos emplazamientos, Shane encontró diverso material abandonado, objetos de oficina, fotografías de los trabajadores, e incluso algunos especímenes de reptiles en frascos, probablemente esperando una autopsia que jamás llegó.
Una cosa era abandonar una instalación, pero otra diferente era no recoger ciertos elementos sensibles, como si el lugar hubiese sido abandonado a la carrera.
El sitio, ahora, es el hogar y cobijo de varias especies salvajes como buitres. Pero la expedición se encontró un hecho aún mas inquietante: la instalación eléctrica y las luces seguían funcionando. Cada noche, aquellas lámparas que no habían sucumbido al paso del tiempo, se encendían.
¿Por qué Disney mantenía la iluminación y el gasto de luz en un lugar abandonado?
Lo cierto, es que el aspecto de la isla abandonada e iluminada resultaba inquietante, tal y como se muestra en el reportaje que Shane tomó, un lugar atrapado en el tiempo, un reflejo de una época pasada donde incluso parecen resonar aún los ecos de las risas de aquellos que en su día disfrutaron de este enclave.
La isla, según la siempre rumorología latente en Disney, tuvo posibilidades de reabrirse en 2009, transformada en una atracción basada en la popular serie de televisión Lost (“Perdidos” en español). No obstante, estos rumores jamás se llegaron a materializar.
RIP Discovery Island.